KLM ha establecido una asociación con la web Airbnb, que gestiona alojamiento en hogares de particulares que ofertan una parte o toda su vivienda.
Para divulgar este acuerdo han transformado el interior de un McDonnell-Douglas MD11 en un apartamento dividido en tres secciones y que ha estado estacionado en el aeropuerto de Amsterdan-Schiphol.
El acuerdo contempla que desde la web se pueda acceder al buscador de Airbnb, en cuya base de datos figuran alojamientos en 600 destinos.
De entre 10.000 personas que se apuntaron a vivir la experiencia de alojarse en el MD-11, tres resultados premiados. Un matrimonio de Amsterdam con dos hijos de corta edad, una pareja de italianos y dos amigas, una estadolunidense y otra jamaicana, que hacía años que no se veían.
Convenie recordar que los cuatro trirreactores MD-11 que tenía operativos KLM han dejado recientemente de realizar vuelos con pasajeros. Eran los últimos en servicio para vuelos de pasajeros -se siguen utilizando en transporte de carga aérea-, y con ellos se cierra una página emotiva para los amantes de aviación, a los que el MD-11 ha cautivado desde el primer día que voló.