Vueling ha presentando hoy el nuevo uniforme que lucirán sus más de 2.000 tripulantes de cabina a partir de este verano. El objetivo: proyectar una imagen más moderna y renovada, acorde con la compañía.
Profesionalidad, experiencia, cercanía y elegancia son sólo algunos de los valores que han estado presentes durante todo el proyecto que hoy, después de más de un año de trabajo, lleva a la compañía a dar un paso más en su empeño de transformar la experiencia de vuelo de sus pasajeros.
La compañía, consciente de la importancia que supone este cambio entre sus tripulantes, ha involucrado a todo el colectivo en el proyecto desde sus inicios. En una primera fase, a principios de 2014, Vueling puso en marcha una convocatoria interna para que los tripulantes hicieran sus propuestas.
De los cientos de bocetos recibidos se seleccionaron las ideas más atractivas y, a partir de ahí, se creó el equipo de trabajo que ha liderado el proyecto. Paralelamente, el resto de tripulantes ha seguido participando activamente en el proceso de creación través de encuestas para definir aspectos del estilo así como la definición de los colores. Muestra del éxito es que más del 75% de sus miembros se han implicado activamente en este proceso de renovación de su uniformidad.
Como novedades del nuevo uniforme destacan el pañuelo gris de las jefas de cabina, a diferencia del amarillo que lucirá el resto de la tripulación; la corbata, en el caso de los sobrecargos masculinos, que también será de tonos más oscuros que la de los demás tripulantes; una renovada uniformidad de servicio a bordo en la que se incluye la utilización de guantes; el uso de galones por parte de los tripulantes masculinos; el nuevo diseño de las prendas de abrigo y, por último, para ellas, el vestido de una pieza, que se suma a las opciones de usar pantalón o falda.