La Feria Lleida AirChallenge de este año, que se ha celebrado este fin de semana en la plataforma industrial del aeropuerto de Lleida-Alguaire, ha llegado a los 9.000 visitantes, una cifra que representa un incremento de cerca del 40% respecto a los 5.550 registrados el pasado año.
El director de la feria, Antonio Gil, ha valorado muy positivamente la actividad que se ha desarrollado durante sus dos días, tanto en lo que se refiere al ámbito comercial como a la afluencia de público general.
Gil ha explicado que ésta ha sido la edición de la feria en la que se han llevado a cabo más contactos comerciales, que han llegado a los 400, con un número de operaciones cerradas también superior al de pasadas ediciones. «Son muchos los expositores que me han manifestado su satisfacción por estar presentes en la feria, porque han visto superadas sus expectativas», ha asegurado Gil.
Este hecho, según el director de la feria, «responde a los esfuerzos de la organización por orientarla hacia la profesionalización y la especialización aeronáuticas y viene a confirmar su consolidación como plataforma comercial y punto de encuentro para la generación de networking, sinergias empresariales e intercambio de conocimientos entre el sector». Este año, en la feria han tomado parte nueve representantes de marcas de aeronaves, el doble del año anterior.
Esta edición de la feria han llegado 82 pilotos al aeropuerto con sus propios aparatos (fly-in), un número que también supera a los de años anteriores.
Gil resaltó el dato, porque estos pilotos son clientes potenciales de los materiales y servicios que ofrecen los expositores de la feria. Entre las llegadas fly-in y los aparatos expuestos en la feria, la cifra de aeronaves presentes en la feria ha alcanzado los 120.
El programa de la feria también ha incluido diez conferencias informativas, ocho de las cuales han girado en torno a los diferentes ámbitos de formación aeronáutica, en la línea del reforzamiento de esta actividad por la que apuesta la feria.
En cuanto a la afluencia de público general, Antonio Gil ha resaltado que el fin de semana se ha vivido un ambiente familiar y festivo «que también priorizamos, porque nuestra intención es acercar la aeronáutica a la ciudadanía».
El incremento registrado, que se mantiene sostenible en las últimas ediciones, «demuestra que crece el interés de las personas que viven alrededor del aeropuerto por conocer el mundo aeronáutico y que optan por esta opción por vivir una experiencia lúdica».
La feria ha ofrecido un festival acrobático, en el que ha participado el piloto profesional internacional Jorge Macías; exhibiciones de las distintas tipologías de aviación deportiva, con autogiros, paramotores y aeromodelos; aviones históricos y demostraciones de drones, y talleres para los niños.
10a edición de la feria
La feria LleidaAirChallenge de este año, la décima, ha contado con 98 expositores, que han ocupado toda la superficie del recinto. Las escuelas aeronáuticas, dedicadas a diferentes ámbitos, desde el pilotaje hasta el mantenimiento y reparación de aeronaves, pasando por la tripulación de cabinas, el control aéreo o el handling, entre otros, han aumentado su presencia, llegando a los 21 expositores.
El mismo número de stands han acogido a empresas que proveen drones para diferentes usos como la agricultura, la construcción o la extinción de incendios.
También ha habido 4 empresas de servicios que ofrecen aerotaxis preparados para las necesidades de todos los clientes y otras enfocadas al uso de helicópteros.
Un total de 19 se dedican a la exploración espacial, consultoría, reconocimiento aéreo, productos para pilotos y mantenimiento, reparación y fabricación de aeronaves, venta y alquiler de aeronaves de aviación general.
Otros 29 han correspondido a aeroclubs, la Federación de pilotos de ULM y la Asociación de Propietarios y Pilotos de Aviones, entre otros. los expositores se han ubicado en torno a los hangares y al espacio campus, con tres carpas de grandes dimensiones dedicadas, respectivamente, a la formación, a las nuevas tecnologías aeronáuticas ya la nueva movilidad aérea. También se ha contado con un espacio reservado para simuladores.
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Fotos: Generalitat de Catalunya