El pasado 15 de enero aterrizaron en el aeropuerto de Kabul (Afganistán) los primeros cuatro aviones de ataque ligero Embraer A-29 Super Tucano de la incipiente Fuerza Aérea de Afganistán. Forman parte de un lote de 20 aviones que Estados Unidos entrega a Afganistán.
Los aviones han sido ensamblados en Estados Unidos por las empresas Embraer y Sierra Nevada Corporation.
Los A-29 están equipados con dos ametralladoras (una en cada ala) del calibre 50 montadas internamente. En la parte inferior de las alas cuenta con cuatro puntos de anclaje para enganchar misiles de corto alcance y bombas. Debajo del fuselaje puede llevar un depósito adicional de combustible