La información de que el copiloto, acusado de estrellar a propósito el avión de Germanwings con 150 personas a bordo, estaba de baja médica el día del accidente ha abierto un debate en Alemania sobre la posibilidad de que en determinados casos los médicos puedan avisar a la empresa.
Dirk Fischer, experto en transporte de la Unión Cristianodemócrata (CDU) de la canciller Angela Merkel, reclamó que se revise la obligación de guardar silencio de los médicos en determinadas profesiones, en unas declaraciones publicadas hoy en el diario alemán «Rheinische Post».
«Los pilotos deben ir a médicos establecidos por la empresa. Estos médicos deberían estar eximidos de guardar silencio y poder así informar a la empresa y a la Oficina Federal de Aviación», indicó.
El diputado de la CDU Thomas Jarzombek propuso, por su parte, que se cree una comisión de expertos para debatir sobre si se puede evitar la confidencialidad médico paciente para que puedan informar de los diagnósticos en el caso de determinadas profesiones de gran responsabilidad como es el caso de los pilotos.
Según informó la fiscalía alemana, el copiloto de 27 años ocultó a su empresa que estaba de baja médica el pasado martes, el día que decidió supuestamente estrellar a propósito el Airbus de Germanwings que volaba de Barcelona a Düsseldorf. Por ahora, no fue confirmado oficialmente que éste tuviera fuertes problemas psíquicos y de visión, como se informa en los medios.