El Colegio Oficial de Pilotos de la Aviación Comercial (COPAC) ha elaborado por quinto año consecutivo el Aerobarómetro, un estudio de percepción realizado entre los colegiados sobre los operadores, las instituciones aeronáuticas y el sector aéreo. El análisis de los resultados del Aerobarómetro 2015 y la evolución de las valoraciones de los últimos cinco años, llevan al COPAC a plantear una serie de propuestas orientadas a mejorar el estado de la aviación en España.
1.- Las autoridades deben ofrecer un apoyo decidido al sector aéreo para que los operadores nacionales recuperen su posición en el mercado internacional, generen empleo de calidad y sean un motor de riqueza ligado a la industria del turismo. Los colegiados comparten mayoritariamente esta opinión, que avala la necesidad de contar con una estrategia global para el transporte aéreo en España, donde la seguridad de las operaciones y la calidad del servicio a los usuarios de la aviación sean aspectos prioritarios.
2.- El Ministerio de Fomento y los organismos aeronáuticos deben renovar su gestión de las cuestiones que afectan al sector aéreo. El inmovilismo que muestran los resultados del Aerobarómetro entre 2011 y 2015 ponen de manifiesto una falta de sensibilidad y conocimiento hacia aspectos fundamentales para el buen funcionamiento de la aviación desde el punto de vista operacional, de seguridad y también de competitividad de un sector globalizado y muy dinámico. Ninguna de las organizaciones públicas valoradas -Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), Enaire/Aena y Comisión de Investigación de Accidentes e Incidente de Aviación Civil (CIAIAC)- consigue el aprobado de los pilotos, por quinto año consecutivo.
3.- La Administración debe contar con el conocimiento y experiencia de los pilotos, como expertos en operación de aeronaves. Los pilotos consideran de forma mayoritaria que la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) debe incorporar la visión y experiencia de los pilotos y aprovechar su conocimiento para realizar funciones relacionadas directamente con la operación aérea. La ausencia de ese conocimiento explica que los profesionales consideren que AESA no promueve la cultura de seguridad ni supervisa adecuadamente las operaciones.
4.- La investigación independiente de accidentes e incidentes de aviación comercial debe recaer en un organismo multimodal con los recursos necesarios. Los colegiados consideran que la CIAIAC no es independiente, un requisito imprescindible para garantizar la eficacia de las investigaciones y su labor preventiva.
5.- Los operadores aéreos deben fomentar la comunicación con sus pilotos, para a su vez generar confianza y respeto entre los miembros de la organización. Los colegiados consideran que la relación entre pilotos y alta dirección tiene mucho margen de mejora. El contexto profesional es determinante en el funcionamiento de una organización, más aún en un sector tan vinculado a la seguridad como el aéreo, donde debe existir una cultura de seguridad que genere confianza para reportar cualquier aspecto que contribuya a mejorar las operaciones aéreas.
6.- Las programaciones deben tener más en cuenta el impacto de la fatiga y los límites de actividad. Ambos aspectos obtienen una mala valoración por parte de los pilotos. Precisamente la fatiga es un factor de riesgo para la seguridad de las operaciones, por lo que es preciso evitar su aparición con programaciones de vuelos adecuadas.
7.- Las actividades de Trabajos Aéreos requieren más supervisión, más seguridad y más transparencia. El Aerobarómetro 2015 refleja las carencias de un sector muy afectado por la siniestralidad. Para el COPAC el compromiso de las administraciones es prioritario, ya que se trata de actividades orientadas al servicio público –extinción de incendios, vuelos medicalizados o salvamento-. Los pliegos de condiciones técnicas son la base de un posterior servicio de calidad, ya que deben exigir medidas razonables de seguridad.
8.- El sector aéreo nacional debe recuperar la experiencia y el conocimiento de los pilotos españoles que se han ido a operadores extranjeros en los últimos años. Como otros colectivos profesionales, muchos pilotos se han ido al extranjero en busca de oportunidades profesionales. En la mayoría de los casos son pilotos con amplia experiencia que pueden contribuir a mejorar y fortalecer nuestro transporte aéreo.
9.- El acceso a la profesión debe ser escrupuloso, con los filtros y procesos adecuados y valorando las competencias y habilidades del piloto. Sólo de esta forma se accederá a la profesión por los cauces normales, sin incurrir en prácticas como el “pagar por volar” que degradan el ejercicio profesional y que generan una gran preocupación entre los pilotos.
10.- Pilotos, operadores y autoridades han de colaborar para frenar el deterioro profesional que se ha producido en los últimos años y mejorar la calidad del servicio a los usuarios. Para los colegiados el principal problema del sector es el deterioro profesional, seguido del desempleo y la debilidad de la industria aérea nacional. Sólo desde la colaboración y la suma de criterios se pueden plantear medidas de mejorar eficaces.