El sector de la aviación y sus aseguradoras han tenido que afrontar importantes retos en los últimos años tras la pandemia de Covid-19, la crisis energética o la guerra de Rusia en Ucrania, entre otros.
Sin embargo, la aviación se ha recuperado bien y varios parámetros de 2023 muestran los «mejores resultados de la historia» en términos de seguridad.
Este año, se espera que el volumen de pasajeros aéreos mundiales alcance un máximo histórico (+10,4% interanual), impulsado por las regiones de Asia-Pacífico y Norteamérica. Aunque las perspectivas generales del sector son positivas, quedan muchos retos por afrontar según el análisis de Allianz Commercial, firma de Grupo Allianz que gestiona seguros corporativos en el sector de la aviación.
Según este informe, el sector de la aviación produce algunos de los siniestros de mayor valor y perfil más alto del sector de los seguros corporativos en todo el mundo.
El análisis de más de 32.000 siniestros del sector entre 2019 y 2024, con un valor total de 15.000 millones de dólares (14.000 millones de euros), muestra que los incidentes de colisión o choque (63%) y la mano de obra defectuosa o los productos defectuosos (22%) son responsables del 85% de las pérdidas.
Otros incidentes, como las catástrofes naturales (4%), las averías de maquinaria (3%) o los incendios (1%) representan una proporción mucho menor del valor de los siniestros.
«El mercado de la aviación se encuentra en un momento interesante y posiblemente sin precedentes, ya que el ciclo tradicional del mercado se ha visto interrumpido por el impacto de la pandemia y las guerras. El continuo crecimiento de este sector hará que las primas alcancen en 2024 su nivel más alto en 20 años, con más de 8.000 millones de dólares», afirma Tom Fadden, director global de Aviación de Allianz Commercial.
«Vemos un creciente interés en los seguros multinacionales, y más consultas para la colocación de seguros internacionales, impulsado por el aumento de las preocupaciones geopolíticas y regulatorias y el deseo de los clientes de contar con una estructura de seguros altamente gestionada. Sin embargo, los nubarrones siguen cerniéndose sobre las aseguradoras, con datos de pérdidas publicados y la inflación presionando los resultados», añade Fadden.
Aumentan los costes de reparación, los incidentes en tierra y faltan mecánicos
En los últimos años se ha producido un aumento significativo de los costes de reparación de las aeronaves, impulsado por el incremento de las tarifas de mano de obra y el coste de las piezas de los aviones, entre otros factores, como la inflación.
El cambio a aviones de última generación sigue repercutiendo en los siniestros, especialmente en lo que se refiere a los costes de desmontaje y reparación de motores. Además, la creciente escasez de mecánicos aeronáuticos puede afectar a la actividad siniestral en el futuro.
Las reparaciones pueden llevar más tiempo si los proveedores carecen de mano de obra o de eficacia. Un mayor número de mecánicos con menos experiencia podría significar que no tienen la capacidad de reparar una pieza, lo que significa que habría que sustituirla por una nueva que suele ser más costosa. Una preocupación obvia es que esa carencia acabe provocando un accidente, a pesar de los sistemas de control y equilibrio existentes en el sector.
«Tampoco se puede ignorar el hecho de que las salidas de pista muestran una tendencia más alta en 2024 que en 2023, con al menos 23 registradas en todo el mundo de enero a mayo de 2024, causadas por problemas meteorológicos y técnicos, entre otros. Asimismo, se ha producido un notable aumento de los siniestros de asistencia en tierra en los grandes aeropuertos.
Aunque las reclamaciones por ‘air rage’ han caído en picado desde la pandemia, observamos un aumento de las reclamaciones por daños derivadas de la creciente demanda de viajes y escapadas en helicóptero», asegura Cristina Schoen, directora global de Siniestros de Aviación de Allianz Commercial.