El avión Solar Impulse 2, pilotado por André Borschberg, ha aterrizado en el aeropuerto de Kalaleoa (Hawai) a las 5:55 hora local, después de haber volado durante casi cinco días desde el aeropuerto de Nagoya (Japón), sin consumir combustibles fósiles.
El avión vuela gracias a cuatro motores eléctricos que se abastecen de la energía solar que captan las células fotovoltáicas que cubren la parte superior del ala y que se almacena en las baterías que llevan el avión, lo cual le permite volar de noche.
El vuelo ha durado cuatro días, 21 horas y 51 minutos y la distancia que ha recorrido es de 8.285 km. Por tanto, este es el vuelo de mayor duración y el más ecológico de la historia de la aviación.
El Solar Impulse 2 comenzó el pasado mes de marzo la vuelta al mundo en Abu Dhabi, con la previsión de que realizase 12 vuelos. Al menos hará 13, pues el vuelo entre Pekín y Hawai se tuvo que cancelar por mal tiempo, lo cual obligó al piloto a desviarse a Nagoya (Japón).