Un avión de Lufthansa que volaba de Bilbao a Múnich el pasado mes noviembre estuvo a punto de precipitarse a tierra cuando los sensores se congelaron y enviaron datos erróneos al sistema de navegación, según informa la revista alemana Der Spiegel.
Un avión de Lufthansa que volaba de Bilbao a Múnich el pasado mes noviembre estuvo a punto de precipitarse a tierra cuando los sensores se congelaron y enviaron datos erróneos al sistema de navegación, según informa la revista alemana Der Spiegel.